Las acciones de salud son todas aquellas intervenciones sobre la población, los individuos o el ambiente, que buscan un efecto positivo sobre el fortalecimiento o la restitución del estado de salud.
Las distintas acciones de salud corresponden a distintas etapas del proceso que lleva de la salud a la enfermedad (como se indica en el cuadro de la “Historia natural de la enfermedad”). Se clasifican en: promoción, prevención primaria, prevención secundaria, prevención terciaria y rehabilitación.
Las acciones de promoción de la salud están dirigidas al hombre y a la población sanos. Son fundamentalmente formas de comunicación que tienen por objeto informar y motivar para lograr conductas sanitarias positivas. Por ejemplo: la exhibición de vídeos, folletos o afiches que difunden información acerca del HIV/SIDA o el cuidado del ambiente.
Incluye aquellas acciones que se orientan hacia el hombre y la población sanos, aparentemente sanos o que corren el riesgo de enfermar porque carecen de defensas naturales o porque viven en un ambiente agresivo. La prevención primaria es un conjunto de acciones destinadas a que la población fortalezca o refuerce su salud. Por ejemplo: aplicarse vacunas, alimentarse adecuadamente, realizar ejercicio físico.
Llamamos así al diagnóstico temprano y tratamiento oportuno de ciertas lesiones orgánicas o alteraciones psíquicas incipientes que aún no presentan síntomas. Estas afecciones pueden ser diagnosticadas precozmente mediante métodos y técnicas que ha desarrollado la medicina. La prevención secundaria se efectúa mediante el control médico de la salud realizado a través de un examen periódico. Por ejemplo, la realización anual del examen de Papanicolaou en las mujeres, permite detectar lesiones del cuello del útero que no dan síntomas ni signos (período preclínico). El diagnóstico temprano permite iniciar oportunamente un tratamiento.
Las acciones de recuperación de la salud comprenden la atención de quienes han perdido su estado de salud, para tratar adecuadamente su enfermedad, evitando
complicaciones o secuelas. Por ejemplo, si una persona contrae tuberculosis, deberá recibir medicamentos que le permitan sanar. Si un individuo padece una enfermedad crónica como la
diabetes, no podrá tener una restitución integral de la salud, pero debe llevar a cabo un tratamiento que incluya un plan de alimentación y ejercicio adecuado, posiblemente medicación y otros
cuidados que le brindarán una mejor calidad y esperanza de vida, así como contribuirán a evitar o retardar la aparición de complicaciones y secuelas de su enfermedad.
Las acciones de rehabilitación tienen por objeto desarrollar al máximo las capacidades residuales de la persona que ha sufrido una secuela, para restituirla a la vida normal. Las
personas que tienen sus capacidades físicas o psíquicas disminuidas reciben el nombre de discapacitados. Las causas más comunes de ello son: sensoriales (ciegos, sordos, etc.), psíquicas
(psicóticos neuróticos graves, etc.), orgánicas (diabéticos, cardíacos, etc.), locomotoras (hemipléjicos, amputados, etc.).
La rehabilitación implica una serie de tareas tales como:
Aplicando lo aprendido
¿De qué tipo de acción de salud se trata cada uno de los siguientes casos?
Para trabajar en grupo
1. ¿Cuáles procedimientos o exámenes destinados a la prevención secundaria realizan ustedes o sus allegados o cuáles conocen por algún otro medio?
2. ¿Qué acciones de salud de cada uno de los niveles, destinadas al ambiente, conocen en su lugar de residencia o consideran que deberían llevarse a cabo? ¿Y en la escuela?
3. En el grupo de compañeros, debatan y argumenten sus posturas acerca de quiénes deben ser los responsables y/o actores de cada una de las acciones de salud.
4. ¿A qué tipo de acciones de salud creen que el estado debería destinar más recursos? ¿Por qué?
5. ¿En qué debería consistir, según la opinión del grupo, la “Educación para la Salud”?